Por Fernando Guinea (Perú), Socio de Amrop Perú
El coaching de transición consiste en integrar al proceso tradicional de coaching, otro de aprendizaje transformacional, que puede ayudar a los nuevos ejecutivos en varios aspectos:
- Entender que otras culturas y valores también pueden conseguir resultados exitosos. Frecuentemente, hay una tendencia a sobrestimar la propia experiencia. Esto puede originar opiniones sesgadas, impidiendo la observación y el aprendizaje en un nuevo ambiente. El coach puede ayudar aquí a identificar nuestros preconceptos y a manejarlos.
- Usar la escucha activa y la observación durante la primera fase de la integración. El coach puede ayudar a que uno se dé cuenta de que las preguntas diplomáticas e incisivas, además de una escucha activa, son mejores que tener todas las respuestas.
- Manejar el exceso de entusiasmo y el deseo de cambiar rápidamente la organización. La resistencia al cambio puede parecer a algunos accionistas una amenaza, generando más objeciones que aplausos. La capacidad de dominar este entusiasmo y ser consciente de él puede ayudar al nuevo ejecutivo a dar un paso atrás antes de saltar al frente.
- Manejar las emociones de los equipos. Estas van del entusiasmo al temor e incluso la molestia por no ser considerados para el cargo del nuevo. El coach puede acompañar al nuevo ejecutivo a encontrarle sentido a los retos emocionales, ayudándole a ganarse el derecho de liderar a su nuevo equipo.
- Tener las conversaciones correctas en el momento correcto y de la manera correcta. La preocupación de ser bien recibido puede predisponer al nuevo directivo a evitar las conversaciones clave, o a tenerlas con un bajo nivel de asertividad o, al contrario, dar órdenes excesivas. Las sesiones de coaching son el momento propicio para planificar estas charlas.
- Manejar la propia ansiedad. La capacidad de distinguir los hechos relevantes y tener una visión panorámica dan una sensación de paz para transformar las expectativas en compromisos o de sostener conversaciones que definan exactamente lo que se espera.
El coach de transición ayuda al nuevo directivo a tomar conciencia de su conducta habitual y de sus resultados. De esta manera, el coach y su pupilo diseñan y construyen juntos el futuro.
Artículo publicado en el Diario Gestión
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