Frecuentemente ponemos a prueba a nuestro cuerpo ante distintos “maltratos” que, sin darnos cuenta, terminarán afectando a nuestra salud. Es por esto que, tanto la empresa donde trabajamos, (como nosotros mismos), deberían -por ley- preocuparse de que el entorno laboral sea lo más adecuado posible a lo que una persona requiere.
Particularmente, la preocupación por la salud laboral, (denominada como Medicina del trabajo por la OMS), está estipulada por ley, según el reglamento de seguridad y salud en el trabajo del Perú (Decreto supremo Nº 009-2005-tr), “los trabajadores tienen derecho a que el Estado y los empleadores promuevan condiciones de trabajo dignas que les garanticen un estado de vida saludable, física, mental y social”.
Sin embargo, pese a que existe una ley nacional y otras normas que resguardan la salud y la seguridad de los trabajadores, pareciera que no siempre se cumplen. Dado que según una encuesta realizada por Trabajando.com, el 57% de los trabajadores dice que las empresas no le dan importancia a la seguridad laboral y en el caso particular de los encuestados, el 50% señaló que su jefe no se preocupa de tomar las medidas necesarias para proteger la salud de sus empleados.
Pero los trabajadores parecen comprender la importancia de cuidarse en su trabajo, ya que -orientados por la empresa o no- el sondeo evidencia que el 89% de ellos señala tomar precauciones por iniciativa propia. Quienes no lo hacen, culpan principalmente al descuido propio (50%), el 33% de los encuestados a su empresa, pues ésta no otorga las condiciones básicas para ello y el 13% restante, porque no sabe cómo ser cauto ante los posibles riesgos en el trabajo.
En definitiva, la falta de precaución de las empresas y los empleadores que señalan los peruanos encuestados, se condice con que el 59% de las empresas del país no cuenten con un departamento de prevención de riesgos que prepare y alerte a sus trabajadores sobre los potenciales peligros que podrían correr ni de la manera para evitarlos.
Precauciones necesarias
Si tu caso es similar a la de la mayoría de estos trabajadores, deberás poner mayor atención en lo cotidiano, pues en general se pasan por alto los pequeños problemas de salud que vamos sumando en el día a día. Por ejemplo, las ocho horas que pasamos sentados frente a la computadora pueden significar daños, muchas veces irreparables, para nuestro cuerpo, ya que aparecen enfermedades que se van haciendo crónicas a través de los años. Los dolores de espalda, de cuello, de muñecas, cefaleas y agotamiento; son las afecciones más comunes.
Para evitar lo anterior, tanto las empresas como cada trabajador, pueden tomar algunas prevenciones que son bastante útiles y simples de efectuar. Por ejemplo, en cuanto al equipamiento, es preferible optar por lo ergonométrico al momento de elegir las sillas y los escritorios. Además, se debe cuidar la distancia con la computadora (55 cm apróx.) y con el teclado del cuerpo (10 cm. apróx.).
En cuanto al lugar, éste debiera contar con luz natural, temperatura y ventilación adecuadas. Todo lo anterior impide desgastes físicos y psicológicos. Otra buena opción es descansar algunos minutos y moverse para evitar la rigidez de la musculatura, la sensación de agobio o la desconcentración.
Tan imprescindible es tomar precauciones necesarias, que si realmente se efectuaran, podrían evitarse muchos de los 160 millones de casos de enfermedades profesionales que según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) se dan anualmente en el mundo.
“El día mundial de la salud y seguridad en el trabajo, que ya se acerca, es una buena ocasión para que las empresas evalúen si están otorgando condiciones básicas a sus trabajadores, y estos por su parte, si las están aprovechando y cumpliendo los requerimientos mínimos para cuidar su salud en el ámbito laboral”, dice Ernesto Velarde, country manager de Trabajando.com Perú.
