La Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) invitó a cinco distinguidas personalidades del ámbito empresarial peruano para compartir y debatir sobre el impacto de las personas en el valor de la empresa.
El encuentro celebrado en el salón Virreynal del Hotel Country Club contó con la participación de Inés Temple, Presidente de LHH – DBM Perú y de LHH Chile; Armando Cavero, Socio Principal de la red global de búsqueda de ejecutivos AIMS International, a cargo del Perú, Ecuador y Bolivia; Carlos Heeren, Director Ejecutivo de UTEC y Tecsup; Álvaro Medina Reyna, Gerente General de IBM Perú & Bolivia; y Juan Stoesse, Gerente General de Casa Andina, quienes expusieron sobre las claves sociales, económicas y empresariales del nuevo entorno laboral que influye en la capacitación y retención del talento.
Inés Temple comentó que el reconocimiento del talento es la clave que las compañías peruanas deberían tener en cuenta para ser rentables, ya que se estima que “el 30% de la ganancia de una empresa depende del clima laboral”, precisando que “la gente se va por falta de reconocimiento y no por dinero necesariamente
Por su parte, el experto en contrataciones de altos ejecutivos, Armando Cavero, señaló que las empresas “deben lograr que sus colaboradores sean ‘empleables’ dentro y fuera de la empresa” y “prestar atención productiva la calidad de vida de sus colaboradores”.
A su turno, el Director Ejecutivo de UTEC y Tecsup, Carlos Heeren, reflexionó sobre la importancia de que las empresas sepan direccionar a los Millennials, ya que “es complejo manejar gente talentosa”.
El Gerente General de IBM Perú y Bolivia, Álvaro Merino Reyna, apuntó que la formación del talento de los colaboradores y su pasión por lo que hacen son los pilares que van a permitir a las empresas lograr el éxito y el crecimiento en el tiempo, ya que son “agentes del cambio” en un mundo globalizado que se renueva constantemente.
El Socio Fundador y CEO de Casa Andina, Juan Stoessel, aseguró que el éxito de su empresa está basado en el desarrollo personal y profesional de sus empleados, así como en una permanente retroalimentación al interior de la empresa. “Nosotros estamos constantemente mejorando y afinando nuestros procesos gracias al feedback de nuestros colaboradores y clientes”, detalló el directivo.
El ejecutivo insistió en que “la única manera de que la empresa crezca es teniendo contentos a los colaboradores” y “enfocándote no solo en su crecimiento profesional sino también en sus metas personales”. En ese sentido, el CEO de Casa Andina detalló que “hacia el 2019 nos hemos propuesto tener ingresos por encima de los US$ 100 millones mediante un plan estratégico basado en la felicidad de nuestros colaboradores”.