Más del 76% de personas con discapacidad en el país se encuentran actualmente fuera del mercado laboral, en muchos casos por mitos y prejuicios arraigados en el mundo laboral, señala uno de los principales aspectos de la “Guía para la Inclusión de Personas con Discapacidad en el Lugar de Trabajo”, presentada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el estudio Miranda & Amado Abogados.
La presentación contó con la asistencia del ministro de Trabajo, Daniel Maurate, quien expresó su reconocimiento a esta importante iniciativa. “Creo que hay que agradecer y felicitar a la actividad privada que se compromete con esta importante causa”, señaló.
Agregó que en la Guía se explica con mucha claridad que contratar a una persona con discapacidad no tiene que ser un gesto de altruismo, un gesto de solidaridad, o un gesto de cumplimiento de la ley. “Contratar a una persona con discapacidad es también beneficiarse, porque las personas con discapacidad son muy productivas” expresó el ministro de Trabajo.
Por su parte, Renato Mejía, socio de Miranda & Amado Abogados sostuvo que la Guía es un aporte que busca principalmente sensibilizar y abordar los diversos mitos y prejuicios muy arraigados en el mundo laboral en relación con la contratación de personas con discapacidad y desterrarlos.
El experto dijo que, la referida Guía brinda también pautas para que las empresas cumplan con la Ley 29973 que establece que las empresas del sector privado con más de 50 trabajadores deben contratar personal con discapacidad en no menos del 3% del número total de sus trabajadores. “Pero más allá del tema legal, esta es una Guía muy útil porque contiene recomendaciones para el trato de las personas con discapacidad en condiciones de igualdad, superando los prejuicios arraigados” detallo Mejía.
Algunos mitos
El experto laboralista explicó que la Guía derrumba una serie de mitos. “Por ejemplo, se dice que las personas con discapacidad son menos productivas, que suelen sufrir muchos accidentes, que requieren ajustes complicados y muy caros en el puesto de trabajo o que necesitan ayuda y supervisión permanente o, que no pueden ser despedidas”, apuntó.
Agregó que en la realidad se ha demostrado que las personas con discapacidad tienen rangos de igual o mayor desempeño de productividad que personas sin discapacidad, que son más cuidadosas y respetuosas en el trabajo, cuidan más su puesto laboral y que la mayoría de personas con discapacidad que postulan a un puesto laboral se valen por sí mismas. También en la práctica una persona con discapacidad que comete una infracción puede ser cesada de su puesto como cualquier otro trabajador, puntualizó.
Por su parte, Jorge Toyama, socio de Miranda & Amado, destacó que el centro de trabajo es un lugar privilegiado para derrumbar estos prejuicios pues muchos empleadores que contratan personas con discapacidad testimonian en muchos casos que la discapacidad no es en realidad una limitación. “El lugar de trabajo se convierte en privilegiado para combatir la discriminación” argumentó.
Agregó que la Guía muestra que un modelo de inclusión de personas con discapacidad en el lugar de trabajo comienza con un compromiso de inclusión de la organización, identificación de oportunidades de inclusión, capacitación del personal, colocación y acompañamiento, y una evaluación del proceso.
Datos relevantes
Según la Guía, existen 1 millón 575 mil 402 peruanos que tienen alguna discapacidad, lo que equivale al 5.2% de la población, de acuerdo a los resultados de la Primera Encuesta Nacional Especializada sobre Discapacidad realizada por el INEI en 2012.
El 76.8% de personas con alguna discapacidad se encuentra fuera del mercado de trabajo, y entre aquellas que buscan trabajo, 12.1% no lo consiguen (el triple de la tasa de desempleo nacional).
