Obtener una promoción en el trabajo no siempre está en tus manos

2011

Por Arturo Luna (México) – Director en el área de Retiro de Mercer en la Ciudad de México

Muchas personas quieren obtener una promoción en su profesión y cambiar a una posición o a un nivel más alto por lo que hacen todo lo que está en sus manos para lograrlo. Al final del año sienten que lo hicieron muy bien y que se esforzaron mucho durante los doce meses anteriores y por supuesto, están esperando que la empresa les recompense por ello con una buena calificación, la consecuente promoción o cambio de nivel, y finalmente y también como resultado, un buen aumento de sueldo.

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Esas “recompensas” no siempre llegan y entonces las personas se sienten frustradas, enojadas y resentidas; pero muy pocos se preguntan: ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Qué pude haber hecho diferente para lograr esa calificación, promoción e incremento de sueldo?

Para aquellos que quieren conocer esas respuestas y lograr otro tipo de resultados, les comparto las siguientes reflexiones:

Una buena calificación, una promoción y un incremento salarial, no siempre están relacionados. Esto es clave: ¿Piensas que, por haber hecho una buena labor, por haberte esforzado mucho y por sentir que trabajas más o mejor que los demás, vas a obtener tu promoción?

No necesariamente, porque son cosas diferentes: una buena calificación se consigue haciendo un excelente trabajo, un incremento salarial depende de los tabuladores y de las bandas salariales y una promoción se logra por tus competencias. ¿Te das cuenta? Veamos esto por partes:

Si tienes un buen desempeño, puedes obtener una buena calificación, pero supongamos que tu sueldo ya está en la escala salarial más alta de tu nivel; entonces no necesariamente te va a generar un gran aumento de sueldo, porque las empresas se guían por encuestas salariales para determinar si estás siendo remunerado correctamente y usan “bandas” o rangos salariales dentro de los cuales, todos debemos estar.

Más aún, las compañías con corporativos extranjeros, multinacionales, medianas o grandes, siempre se guían por estas referencias, de tal manera que, aunque hayas hecho una excelente labor, si tu remuneración está en el nivel adecuado de acuerdo a estos indicadores, no esperes un gran aumento (aunque por supuesto, cada firma tiene sus políticas y prácticas salariales y de mérito).

Competencias adecuadas
Por otro lado, hablando de tu promoción, hacer un buen trabajo no siempre significa que la vas a obtener, pues la lograrás cuando adquieras las competencias de ese nivel. Como ejemplo: si te dedicaras al boxeo, no podrías subirte al ring de los profesionales hasta que no hayas conseguido las competencias adecuadas; de otro modo, te podrían destrozar.

Muchas organizaciones tienen personas que han subido de nivel a través de promociones sin haber cumplido las competencias necesarias y, aunque eso puede ser una estrategia planeada, en muchos casos la persona “revienta” al no estar lista para enfrentar las responsabilidades de esa nueva posición.

Supongamos, por ejemplo, que tu nuevo cargo al que serías promovido, requiere habilidades comerciales o de liderazgo. Por haber hecho un maravilloso esfuerzo el año anterior, no significa que ya eres un buen vendedor o un buen líder. Tienes que trabajar para conseguir esas nuevas competencias. Si llegas al nuevo nivel, te podrían poner una meta comercial y si no sabes vender, vas a estar en serios problemas.

Yo te recomiendo que, si estás buscando una promoción, busques proactivamente aquellas competencias que tienes que adquirir o mejorar. Lograr resultados y buenas calificaciones es necesario, pero no lo es todo. Las competencias son vitales para el crecimiento.

Normalmente las compañías tienen definidas las competencias que requiere cada nivel o posición, pero si no fuera así o si no tienes acceso a ellas, mi sugerencia es que comiences a observar y “modelar” a la persona que hoy ocupa esa posición que deseas, o a alguien similar. ¿Cómo se comporta esa persona? ¿Qué cosas sabe hacer? ¿Qué habilidades tiene? ¿Qué fue lo que la llevó hasta allá? ¿Qué de eso te sirve a ti para crecer? Comienza a imitar, a comportarte como él (o ella) y a prepararte (estudiar, practicar, certificarte, etc.) para que cuando crezcas, sea sólida y contundentemente.

Recuerda que lo que te trajo hasta donde estás hoy, no necesariamente será lo mismo que te llevará hasta dónde quieres estar.

Fuente: Forbes

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