Los trabajadores en planilla tienen derecho a gozar de treinta días de vacaciones al año. Pero, en algunos casos si necesitan de más ingresos, pueden vender a sus empleadores parte de estas vacaciones.
Germán Lora, Jefe del Gabinete de Asesores del Ministerio de Trabajo, señala que “La ley establece la posibilidad de venta de vacaciones. No es ilegal. El trabajador puede vender hasta quince días de sus vacaciones”.
El funcionario indicó que, por ejemplo, si un trabajador vende 15 días de vacaciones de junio, a fin de mes recibirá un sueldo y medio de remuneración. Lora explica que para aplicar esta venta de vacaciones, debe existir un acuerdo entre las partes, sin imposiciones de ninguna de ellas.
“Tiene que haber un acuerdo. Si la empresa no quiere comprar las vacaciones, no tiene que hacerlo”, concluyó.