La tecnología está en un proceso de cambio constante, que exige a los empleados saber manejar estas nuevas herramientas que benefician a la empresa. Esta labor hará que la fuerza de trabajo se sienta motivada y productiva.
Innovaciones como el Smart working impulsan un método que haga rendir al máximo a los profesionales sin importar dónde se encuentre. “La empresa tiene que dar confianza al trabajador para que realice su trabajo adecuadamente. De hecho, el smart working está basado en la confianza, en que el trabajador tenga claro cuáles son sus objetivos, se mide más el performance y no las horas trabajadas”, sostiene José Ángel Sandín, consejero delegado de Lefebvre – El Derecho.
Ventajas del SmartWorking
Movimiento. No importa desde dónde se trabaje, sino que se cumpla lo propuesto. Puede hacerse desde una cafetería o una habitación.
El equipo a distancia. Hoy existen diferentes herramientas tecnológicas que permite trabajar en equipo optimizando el tiempo, los recursos y el proceso de ejecución.
La tecnología. internet es la clave, pues permite el acceso a diversos contenidos desde cualquier plataforma, sin importar la hora en que se busque la información.
Flexibilidad de horario. Permite al empleado disponer de una mayor organización de su tiempo, por lo que se mejora la conciliación de la vida laboral con la vida personal.
Acuerdo. Aplicar este método en la compañía requiere la aprobación de empleadores y su personal, para realizar el adecuado repartimiento de funciones y horas, formalizadas por escrito.
