El desgaste profesional, conocido como ‘burn-out’, ha sido incorporado en la Clasificación Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se utiliza para establecer tendencias y estadísticas sanitarias.
La lista, confeccionada por la OMS, se basa en las conclusiones de expertos médicos de todo el mundo. Fue adoptada por los Estados miembros de la OMS, reunidos desde el 20 de mayo en Ginebra en el marco de la Asamblea Mundial de la organización.
Contexto profesional
El desgaste profesional, que fue incorporado a la sección de «problemas asociados» al empleo o al desempleo, llevará el código QD85 y se describe como «un síndrome resultante de un estrés crónico en el trabajo que no fue gestionado con éxito».
Se caracteriza por tres elementos:
- Una sensación de agotamiento.
- Cinismo o sentimientos negativos relacionados con su trabajo.
- Eficacia profesional reducida.
El registro de la OMS precisa que el desgaste profesional «se refiere específicamente a fenómenos relativos al contexto profesional y no debe utilizarse para describir experiencias en otros ámbitos de la vida«.