Durante el mes de diciembre muchas empresas realizan balances, análisis de las metas logradas y las proyecciones para los próximos 12 meses. Algunas optan por hacer este cierre de año con una celebración, donde premian los años de trayectoria, el mejor compañero, el espíritu corporativo, entre otros reconocimientos.
Además, estas celebraciones permiten disfrutar de un ambiente más relajado, compartir con los compañeros y relacionarse con personas de otras áreas. Lo que resulta muy beneficioso para las relaciones laborales, pero por sobre todo para aumentar el compromiso y el sentido de pertenencia con la empresa.
¿Tu empresa realizará una fiesta de fin de año? Si es así, toma apuntes ahora mismo para no desentonar y dañar tu imagen profesional entre tus colegas y jefes. Aunque se trata de una fiesta y la idea es pasarlo bien, no hay que olvidar que con quienes estarás compartiendo no son tus amigos, y aunque puede ser que algunos lo sean, recuerda que tu jefe y colegas estarán ahí.
A veces la emoción de estar en un ambiente de fiesta junto a tus compañeros, te puede hacer cometer ciertas salidas de protocolo que pueden dejar una muy mala impresión. Lamentablemente, esto afectará tu credibilidad como profesional.
Pero, ¿qué está permitido? ¿Qué cosas no debo hacer?
1. El error más común es el consumo de alcohol, ya que si abusas, lo más seguro es que termines bailando arriba de la mesa o tirándote a la piscina con ropa. Todo irá muy bien, pero cuando llegue el lunes, no querrás mirar a nadie. Éste debe ser moderado.
2. La vestimenta es un punto muy importante. Esto dependerá si es fiesta o paseo de fin de año. Si es una celebración formal, deberás ir de traje y corbata en el caso de los hombres, y para las mujeres un vestido. Pero hay que recordar que no es un matrimonio. Si es un paseo, se recomienda ir con tenida sport, algo relajado que te permita participar de una actividad outdoor.
3. El baile, es uno de los momentos de mayor euforia de la fiesta. Pero hay quienes sólo se atreven a salir a la pista si es con algunas copas encima. Esta mezcla es fatal, ya que algunos pierden el control y terminan dándose vueltas en el suelo. Aunque pongan la música que te fascina, mantén la cordura.
4. El comienzo de una fiesta ofrece la oportunidad de conversar con tus colegas y también con los de alto nivel antes que todo se agite. Si llegas tarde te perderás esta posibilidad.
5. No seas antisocial, no te encierres a conversar con los mismos de siempre. Esta es una oportunidad, no tan sólo de pasarlo bien, sino que también puedes generar redes de contacto importantes. Diversifícate y preséntate a las personas de otros departamentos.
6. Si bien, es un ambiente distendido y la idea es no hablar de trabajo, evita las bromas y chistes obscenos. Alguien puede sentirse ofendido y lo recordará al día siguiente.
7. Esta es una ocasión donde se da mucho el coqueteo entre colegas. No lo hagas. De lo contrario, puedes arriesgar más de lo que crees.
8. No critiques a tus jefes ni a la empresa. Que sea un ambiente de relajo, no significa que puedas descargar todo lo que piensas. Te hará ver como chismoso y puede afectar tu honestidad y lealtad con tu equipo y jefe. Guarda tus opiniones para una junta oficial.
“Dejar de asistir a la fiesta de fin de año que organiza la empresa, es un error, no tan sólo porque te pierdes la oportunidad de compartir con compañeros de otras áreas de trabajo, sino que también porque la empresa invierte una gran cantidad de dinero en esto, y será mal visto que desprecies este esfuerzo de la compañía”, señala Ernesto Velarde, country manager de Trabajando.com Perú.