La Academia es Básica, pero el Comportamiento es Fundamental

3373

 

Por: María Isabel Acosta Arcila
Thomas International Perú
 
 
“Contratamos personas por sus habilidades técnicas,
pero las despedimos por sus fallas comportamentales”.
                                      (Financial Times – Anónimo)

 
 
Es cada vez más importante que los profesionales que se enfrentan al mercado laboral, optimicen las competencias afines al comportamiento adecuado según el perfil establecido por cada organización. Por lo tanto, no sólo asistir a las mejores universidades y tener un amplio plan de estudios, es suficiente. Es preciso que trabajen más en el desarrollo del comportamiento; en las actitudes que deben asumir en las diferentes situaciones que el día a día les propone; pues el no hacerlo, puede significar “una derrota” cuando participen en cualquier tipo de dinámica grupal o integren un equipo de trabajo.
 
Según los expertos en Análisis de Perfiles Personales, es esencial que el ser humano cultive desde la universidad, habilidades de comunicación, expresión oral, manejo excelente de relaciones personales, laborales y empresariales, alto sentido del respeto hacia las personas, apropiación de valores y virtudes; para que su ingreso al mundo laboral, marque un diferencial más competitivo, debido a su formación integral, que en últimas será la que, unida a todos los estudios realizados, le genere un valor agregado, proyectándolo como un profesional estructurado en todo nivel.
 
De igual manera aconsejan que además de invertir en diversos cursos y permanecer en la constante búsqueda del desarrollo técnico, tanto el profesional como la entidad, deben preocuparse más por conocer su perfil comportamental, identificar sus talentos, reconocer sus fortalezas y limitaciones, comprender mejor cuáles son sus temores básicos, tener presente el rol que desempeña dentro de su equipo y trabajar en el cubrimiento de las necesidades de entrenamiento respecto al cargo que ocupa.
 
Conocerse y saber cómo comportarse, amplía los horizontes y las posibilidades de elección y de éxito. Muchos individuos como estudiantes e incluso profesionales, son rehenes de su falta de autoestima, quienes por no conocerse, se limitan a aceptar los puestos, funciones o tareas que no son compatibles con sus perfiles de comportamiento natural, y para satisfacer las exigencias del cargo ó para tener éxito en sus funciones, modifican su proceder, con un alto costo emocional que puede generar frustración, estrés o incomodidad extrema en el ejercicio.
 
En la actualidad lo que determina la contratación de un candidato no es sólo su currículum, las estadísticas establecen las siguientes proporciones: 30% para el plan de estudios y el 70% para la entrevista y el perfil comportamental requerido, en función de la cultura de la organización.
 
Es importante que los individuos cuenten con la asesoría necesaria para saber quienes son en realidad, mediante tutorías, cursos de preparación o entrenamiento, que les permitan participar decididamente en los procesos de selección y contratación.
 
Existen en el mercado empresas que ayudan a resolver esos dilemas humanos, que mediante sistemas de evaluación on – line o de inteligencia artificial, definen de manera rápida y precisa el perfil comportamental de un candidato, detectando sus talentos naturales, permitiendo conocer lo que la persona realmente es, cuáles son sus gustos o preferencias, sus motivaciones, cuáles son sus características principales, el valor que aporta a la organización, cómo administrarlo como capital humano, pero fundamentalmente: Cómo debe ser su comportamiento en el lugar de trabajo.

 

Comentarios