¿Cómo están enfocando el tema de la responsabilidad social?
Nosotros lanzamos la Fundación Deloitte el año pasado, con motivo de nuestros 75 años de Deloitte en Perú, con el objetivo de agrupar todas las iniciativas de responsabilidad social y trabajarlas de manera estratégica.
Un segundo elemento fue incorporar un concepto muy innovador que es la colaboración a través de proyectos pro bono con ONG y organizaciones que trabajen el tema educativo y cultural. A pesar que algunas empresas lo hacen en Perú, no conocemos a ninguna que lo haga de una forma estratégica. La cultura y la educación para nosotros son temas muy importantes, porque somos una organización de servicios, y nuestra materia prima fundamental son personas con un nivel de educación y de formación importante quienes prestan los mejores servicios profesionales a nuestros clientes. Consideramos que la educación es un tema crucial para el desarrollo de nuestra organización y, obviamente, para el desarrollo de la sociedad.
Y han obtenido un premio importante por esa iniciativa…
Este concepto, desde que lo lanzamos, ha sido muy exitoso. Hemos tenido una gran acogida en el mercado. Lo presentamos al Deloitte Green Dot Awards de este año y ganamos. Fue una sorpresa muy agradable para nosotros. Sabíamos que era una iniciativa muy bien hecha y nos sentíamos muy cómodos, pero no pensábamos que íbamos a ganar, sobre todo en el primer año.
Competimos con más de 60 iniciativas de responsabilidad social, dentro de las cuales, al final quedamos tres. Una de ellas era del medio oriente, referido a la inclusión femenina en el campo laboral; y la otra fue del Reino Unido, que estaba enfocada en la educación para niños. Pero, nosotros fuimos los ganadores.
¿Cómo han logrado fomentar el voluntariado y apoyo a las iniciativas de responsabilidad social en Deloitte Perú?
Instituir la cultura de responsabilidad social en los colaboradores es un compromiso diario. Hay que comunicar de manera clara que este tema es importante para ellos, que agrega valor tanto a la sociedad, a las personas como a la empresa. Nuestra estrategia es una suma de cosas que hacemos para mantener al voluntariado activo, para mantener a la gente entusiasmada con los proyectos.
Es esencial, por ejemplo, mantener a los colaboradores muy informados e involucrados y, asimismo, plantearles actividades que los reten y les permitan ser creativos. Lo interesante del voluntariado es que estimula la creatividad y ofrece más libertad de acción a los colaboradores que cuando trabajan en el medio corporativo. Entonces eso es importante también.
Solo para comentarte, el primer año tuvimos más o menos 4000 horas de voluntariado, y este año esperamos lograr un poco más.
¿Los voluntarios obtienen algún reconocimiento por su participación?
No obtienen ningún beneficio económico directo, pero sí se otorgan reconocimientos en el día a día, y también ya hemos pensado llevar a cabo reconocimientos públicos. Sin duda, esos aspectos son importantes para mantener energizado a los colaboradores.
Adicionalmente, todos los colaboradores obtienen una constancia –firmada por la alta gerencia– por su participación en los proyectos, y eso se toma en cuenta en su proceso de evaluación anual y en sus ascensos. Por lo tanto, se puede decir que hay –indirectamente–,un beneficio económico.
Otro incentivo es que el hecho de participar como voluntario revela una actitud de liderazgo, y el liderazgo es algo que nosotros valoramos mucho en nuestra empresa y también lo valora el mercado. Los colaboradores tienen claro que los temas de liderazgo en un currículum tiene un enorme peso. Este es otro elemento que incentiva a la participación.
¿Qué tan importante es la responsabilidad social para Deloitte?
La responsabilidad social para nosotros es sumamente importante por varias razones. Es clave entender que la responsabilidad social moderna -como creemos que debe entenderse hoy en día-, va mucho más allá de, sencillamente, devolver algo a la sociedad o de hacer alguna obra de caridad. En nuestro caso, asumimos que la responsabilidad social es parte del negocio. Entendemos que la única fórmula de mantener tasas de crecimiento positivas y que la sociedad crezca, y por lo tanto, los negocios y la economía se expandan, es mediante la inclusión. Por lo tanto, invertir en responsabilidad social es sumamente importante para generar toda esta riqueza y todo este crecimiento que necesitamos como país.
Asimismo, la responsabilidad social, desde el punto de vista del medio ambiente es fundamental, porque si no hay planeta no vamos a tener dónde hacer negocios. Para Deloitte es parte de su estrategia de negocios realizar inversiones fuertes y de forma continua en este sentido.
¿En qué consisten concretamente las actividades de responsabilidad social que están llevando a cabo?
En la Fundación apoyamos a las ONG en los temas que nosotros sabemos hacer. En Deloitte contamos con buenos auditores, contadores, consultores, estrategas, y somos buenos en todo lo concerniente a la parte legal y tributaria, entonces ayudamos a estas instituciones en aquellos aspectos donde sabemos que tienen muchas carencias. Así los ayudamos a ser exitosos y estar mejor organizados para que ellos realmente se dediquen a lo que es su core, que es ayudar.
Este trabajo lo hacemos con nuestros propios voluntarios, con lo cual involucramos al personal de la firma en todas las labores. Entonces, ahí se genera un sentido de pertenencia en el personal y también se promueve en ellos la incorporación del concepto de responsabilidad social.
¿Cuáles son los siguientes proyectos que van a desarrollar en el tema de responsabilidad social?
Nosotros ya estamos trabajando con Junior Achievement, con la organización D1 de Vania Masias, también con United Way y con Enseña Perú. Este año estamos incorporando al Patronato de la Universidad del Pacífico como uno de nuestros proyectos, y también el proyecto de Deloitte Finlandia y Cedro. Adicionalmente, estamos evaluando algunos proyectos más.