¿Por qué es importante gestionar la cultura y el clima organizacional en las empresas?
Es indispensable gestionar la cultura y clima organizacional para modelar el comportamiento de los individuos que la integran y no correr el riesgo de tener comportamientos inadecuados.
Pero, ¿cuál es la relación entre clima y cultura organizacional?
La cultura y el clima organizacional impactan directamente en la gestión, influyen en el comportamiento organizacional y, por tanto, en los resultados de la organización.
¿Cuáles son las principales ventajas de gestionar estas variables?
Al gestionar la cultura y el clima, podemos conocer y comprender la forma cómo las personas entienden su realidad laboral y, a través de un apropiado diagnóstico, se pueden establecer planes de acción orientados a mejorar las variables clave de la organización.
¿Cómo se determina qué tipo de cultura es idónea para una empresa en particular?
Existen tantas culturas o subculturas como organizaciones y comunidades humanas y no hay culturas buenas o malas, sino adaptadas, que son las que buscan la supervivencia, o desadaptadas, que ponen en peligro de extinción a la propia comunidad.
¿Existen varios tipos de cultura?
Pueden existir diferentes culturas o subculturas. Por ejemplo, una cultura puede existir en una organización entera o bien referirse al ambiente de una división, filial, planta o departamento.
¿Cómo comenzar a gestionar la cultura de la empresa? ¿Qué factores hay que tener en cuenta?
Se debe iniciar la gestión definiendo con la alta dirección la cultura ideal, para luego realizar la investigación en campo generando la línea base, es decir, dónde se encuentra la organización con respecto a lo definido como ideal. Para ello se utilizan cuestionarios, entrevistas individuales y “focus group”.
A partir de los cuestionarios, entrevistas y “focus group”, se analiza la información, se determina la brecha entre lo ideal y la situación base para generar el Plan de Acción, estableciendo objetivos, metas, estrategias, indicadores de medición, tiempo (cronograma), recursos y responsables. Es decir: qué hacer, cómo, cuándo, con qué y quién.
¿Cuáles son los temas más complejos que surgen cuando se gestiona la cultura?
El tema más complejo que surge es el cambio. Las organizaciones se plantean retos y han demostrado que el presente es de quienes se adaptan más agresivamente a las nuevas realidades, y que los retos del futuro son superables cuando se toma conciencia del papel de la innovación en un entorno cambiante. A medida que las organizaciones desafían el cambio, será determinante que la alta dirección desarrolle nuevas estrategias para gestionar a las personas que comparten la cultura.