Un día de trabajo no va ser siempre tranquilo. Las responsabilidades, las tareas y hasta el mismo ambiente pueden generar que un colaborador pierda el interés frente a su jefe.
Según un articulo de la revista Forbes existen tres maneras muy simples de impresionar y destacar frente a su jefe cuando existen momentos de presión.
- Priorizar tareas puede reducir la presión, piense que necesita su jefe y los plazos más cercanos. Anote todo el trabajo que tiene, enumere sus tareas en orden de prioridad y luego agrupe las que son similares. Asegúrese de centrarse en lo que es importante. Convierta esto en su oportunidad para mostrarle a su jefe sus habilidades para tomar decisiones.
- Comunicación, es muy importante que usted mantenga una comunicación con sus colegas. Comuníquese regularmente con su jefe. Para asegurarse de que ambos están en el mismo camino, comparta con su gerente lo que ha priorizado para así obtener sus comentarios. Los líderes se comunican, así que demuéstre a su gerente que usted puede hacerlo. Haga preguntas, sobre todo si su jefe no brinda mucha información o si sus prioridades no están del todo claras. Si necesita orientación y ayuda para definir las prioridades, haga preguntas acerca de cómo tal o cual proyecto se relaciona con los objetivos empresariales generales de la organización y si un proyecto está vinculado a otros con plazos cortos.
- Respete su horario de trabajo, tiene que tener en cuenta que el trabajo es una maratón, no una carrera de velocidad. El trabajo siempre estará allí, así que identifique un ritmo que le permitirá mantener su productividad y eficacia. Evitando proyectar una imagen que usted es un esclavo de su trabajo. Su gerente puede apreciar su compromiso con su empleo pero puede cuestionar su capacidad de manejar más responsabilidades.
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