Dedicar más tiempo al trabajo que a la familia puede ser visto para muchas personas como una inversión en los primeros años laborales debido a que en esa etapa es cuando se empiezan a formar como profesionales y esperan “sembrar hoy para cosechar mañana”.
Pero los hijos no necesariamente piensan lo mismo. Según una encuesta de Trabajando.com realizada a más de 2.300 personas, en el marco de la celebración del día del padre, un 44% de los peruanos siente que sus papás estuvieron ausentes durante su niñez.
La causa: la gran cantidad de tiempo que le dedicaban al trabajo. Un 34% considera que el tiempo que pasaban juntos fue lo suficiente para compatibilizar trabajo y familia y sólo un 22% señaló que pasó bastante tiempo junto a su padre, ya que siempre estuvo presente.
Para muchos peruanos es importante no repetir su historia de vida y ser capaces de lograr un equilibrio entre la casa y el trabajo. Al menos así lo dejó de manifiesto un 64%, mientras que el 36% restante asegura aún estar en deuda en esta materia con sus hijos.
Antes los padres tenían un mayor protagonismo en la vida de sus hijos. No sólo el sistema de vida les permitía pasar más tiempo con ellos sino que también el trato era distinto: su opinión era escuchada e incluso no se podía poner en duda algo dicho por él.
Ahora las cosas han cambiado y no sólo se comparte menos sino que también los niños son más independientes y autónomos. Ya no se suele nombrar a los hijos como el padre a través de las generaciones e incluso se dejó la tradición de que el hijo debía escoger la misma profesión que el papá.
Así lo demuestran las cifras, las decisiones son mucho más propias, prueba de ello es que el 44% de los encuestados dice que a la hora de elegir una carrera tomó la decisión libremente, un 36% asegura que su padre lo ayudó al momento de escoger y un 20% destaca que nunca se tocó el tema entre ambos.
Al momento de evaluar los factores que influyeron a la hora de tomar la decisión sobre qué estudiar, para un 50% primó buscar una carrera que sea bien remunerada, un 39% privilegió una carrera que le permitiera tener vida familiar y un 11% seguir una tradición familiar.