No es un secreto que las mujeres han alcanzado niveles importantes de presencia e influencia. En todas las edades, su participación en el mundo laboral asciende cada vez sostenidamente. En el Perú, solo en los últimos 10 años según el INEI, la cifra de mujeres con trabajo ha crecido 23.2%. Así, de las 7 millones 209 mil que se encuentran en edad de trabajar, 6 millones 947 mil tienen un puesto de trabajo.
Lo más interesante de esta tendencia es que el 74.7% de las mujeres peruanas labora en una microempresa y el 6.4% en una pequeña empresa, lo que revela el desarrollo de este sector. Solo el 18.9% lo hace en una empresa de mayor tamaño. Las áreas con mayor presencia de este grupo son los servicios (40.5%), actividades comerciales (25.6%) y agricultura (22.3%).
Sin embargo, pese a este crecimiento, aún se mantienen las diferencias con los hombres en referencia al nivel salarial y al tipo de puesto. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las mujeres ganan el 77% de lo que perciben los hombres. Y, además, en el país, solo 3 de 10 ejecutivos son del sexo femenino.
La generación x y las baby boombers
Nacieron en años muy diferentes pero, pese a ello, mantienen ciertas características en común. Las mujeres de la llamada Generación X (nacidas entre 1964 y 1980) y las Baby Boomers (nacidas entre 1945 y 1964, tras el inusual crecimiento de la tasa de natalidad luego de la segunda guerra mundial) se han convertido, en muchos casos, en el principal pilar de las familias, al ser padre y madre a la vez y ser el primer referente para sus hijos.
Estas mujeres, que coinciden en tener una vida activa, asumir grandes responsabilidades y ser las encargadas de dar la posta a la aclamada “Generación Y”, han alcanzado en países como el Perú una presencia importante.
temores y preocupaciones
El estudio realizado por Ronald, Career Services Group, revela que el 60% tiene como principal preocupación que la despidan de su trabajo y que la liquidación que reciban no alcance para cubrir los gastos que representa la familia. “Esto significa que una gran parte de estas mujeres vive bajo una gran presión por mantener su puesto trabajo, porque representa el principal y, a veces, único sustento familiar”, señala Ernesto Rubio, gerente general de la firma.
Solo un 32% manifestó no tener ninguna preocupación y un 8% expresó su temor en que las nuevas generaciones terminen por marginarlas de sus puestos laborales.
Por un sueño profesional
Sin embargo, las mujeres de la “Generación X” y las “Baby Boomers” han sido bastante aplicadas y perseverantes en sus aspiraciones. La profesión u oficio que eligieron en su momento significó el inicio de una carrera que les dio satisfacciones pero, sobre todo, la seguridad de contribuir con el presupuesto familiar.
En esa línea, por ejemplo, el 52% de las encuestadas reconoció que aún ejercía la carrera que había estudiado, lo que implica, en líneas generales, que su elección fue acertada y les generó un desarrollo profesional.
Sin embargo, Ernesto Rubio destaca que “este grupo de mujeres es consciente que los tiempos han cambiado vertiginosamente. Y, en ese sentido, saben que las profesiones que eligieron en su momento no son necesariamente las más idóneas para enfrentar las nuevas exigencias del mercado laboral”.
Así, el 40% de las encuestadas señalan que, en su momento, hubiera elegido una carrera relacionada a los negocios como administración, economía o ingeniería empresarial. Esto implica que los nuevos tiempos han despertado en estas mujeres un espíritu empresarial que aspira construir emprendimientos propios que sintonicen con las nuevas características del mundo moderno.
¿Proyecciones planificadas?
Las mujeres de estos dos grupos generacionales tienen muy claro que aún tienen cuerda para rato. Su experiencia profesional y conocimiento de las tendencias del mercado laboral son dos grandes valores que les permiten seguir teniendo aspiraciones en la vida.
Por ejemplo, el 46% de las limeñas de la encuesta de Ronald, Career Services Group, aseguraron que quisieran mantenerse en sus centros de labores pero en una mejor posición y con mejores ingresos. Un 46% confesó que desearía trabajar por su cuenta.
Ernesto Rubio afirma que “en ambos casos, se revela que estas experimentadas mujeres aspiran seguir creciendo, ya sea dentro de su ambiente laboral o de forma independiente. La mujer limeña de la ‘Generación X’ y las que son parte de las ‘Baby Boomers’ tienen mucho por seguir aportando a la sociedad y ellas son muy conscientes de eso”.
Sin embargo, las aspiraciones muchas veces se las lleva el viento. Los sueños por seguir creciendo no tienen el suficiente soporte para concretarse y terminan perdiéndose. Así, si bien las limeñas de ambos grupos generacionales saben perfectamente qué es lo que desean tener a los 70 años (estabilidad económica, pasar tiempo en familia o viajar), un 28% no tiene un plan para llevar a cabo este anhelo, lo que significa que aún falta desarrollar un soporte que garantice canalizar los sueños en la etapa mayor de la vida.