Cambiar el papel al soporte digital supone un ahorro aproximado del 60% de costos en la impresión, gastos de distribución y archivo. Teniendo, además, la posibilidad de disponer de toda la información con un solo “clic”.
La transformación electrónica debe ser vista como un paso relevante en la transformación digital de las empresas peruanas. O, al menos, como una gran oportunidad. Para Carlos Drago, jefe del Programa de Transformación Digital de SUNAT, se trata de un elemento clave que suele empujar a un cambio estructural en las organizaciones, alentado por la promesa de una mayor eficiencia y competitividad en los procesos digitalizados. “A partir de la implementación del comprobante electrónico, muchas empresas han acelerado su transformación digital”, sostiene el funcionario.
A continuación, te mostramos cinco beneficios que brinda la digitalización del área de RRHH:
- Menos dinero y disponibilidad inmediata. Cambiar el papel al soporte digital supone un ahorro aproximado del 60% de costos en la impresión, gastos de distribución y archivo. Teniendo, además, la posibilidad de disponer de toda la información con un solo “clic”.
- Una buena administración. Mejora la gestión del negocio, la productividad por optimización del proceso y sistemas de facturación. Con la información en línea, se pueden obtener datos estadísticos y agilizar la toma de decisiones.
- Seguridad y validez legal. La factura electrónica se emite en un ambiente seguro al que se puede acceder durante todo el año. Asimismo, cuenta con el respaldo legal para ser considerado comprobante de pago en cualquier operación comercial y para efectos tributarios.
- Todo está un mismo canal. La SUNAT también ofrece otros servicios de libros electrónicos y de declaración del IGV. «Es una cadena: de la emisión de factura electrónica hasta la presentación de declaración de impuestos», dice Carlos Drago.
- Cuidado del medio ambiente. Si una empresa emite al año 12 mil comprobantes electrónicos, contribuye directamente a evitar la tala de 57 árboles y ahorrar 180 mil litros de agua que se necesita para procesar la madera.
