Despedir no es fácil, pero existen formas de hacerlo sin involucrar sentimientos ni alargar innecesariamente la conversación. A continuación te daremos algunas sugerencias que pueden ser aplicables siempre y cuando le hayas advertido previamente a colaborador que su trabajo no cumplía con las metas planteadas.
- Ve directo al mensaje central
El mensaje central es simple pero lo puedes decir de diferentes maneras: “Ya no requeriremos de tus servicios”, “Tenemos que despedirte” o “Las cosas no han funcionado contigo”. Hay que ir directo al grano porque tratar de endulzar la situación no ayudará. Incluso se podrían confundir más las cosas, haciendo el proceso más difícil para todos.Ayudará reforzar la idea señalando aquello que se esperaba y no se cumplió, para que el trabajador sepa exactamente qué pasó.
- Mantente firme
Si alguna vez has rebatido alguna decisión ya sabes lo difícil que esto puede ser. Muchas personas, en medio de situaciones como esta, pueden apelar al lado sentimental, señalando cosas como “Soy padre y madre para mis hijos”, “Hemos trabajado juntos desde hace 15 años”, “Acabo de endeudarme para pagar mi casa”.Es lógico que sucedan estas cosas, pero debes recordar que esa persona ha sido advertida previamente de las consecuencias de no hacer bien las cosas. No te dejes presionar para salirte del guión.
- Dar razones, pero no demasiado
Es importante poder colocar el mensaje al lado de la razón en la misma oración: “Te estamos despidiendo porque a pesar de que te advertimos dejar esa actitud los has seguido haciendo”, “Te vamos a despedir porque quedamos en cumplir una meta y esta no se ha alcanzado en el plazo acordado”, o “Sé que has hecho todo tu esfuerzo pero aún así no has logrado satisfacer las expectativas que teníamos al contratarte”.Si queremos agregar más información podemos hacerlo, pero siempre y cuando no nos salgamos de la idea principal. El objetivo es no agregar datos que nos pongan en una situación en la que tengamos que terminar discutiendo el punto central.
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Hacer entender
Pueden existir múltiples razones para que un trabajador falle. Una de ellas es que la persona hace su trabajo solo por el salario que recibirá a cambio pero no porque le gusta su trabajo. Generalmente, en estos casos, esa persona se limitará a cumplir su función, sin aportar ideas o propuestas que hagan crecer el negocio. En estos casos podemos explicarle a la persona que no le gusta su trabajo y lo mejor que podrá hacer por su vida es conseguir uno que realmente disfrute. -
Terminar la conversación
Dejar que la conversación se prolongue generalmente es un error. Naturalmente, se pueden responder interrogantes sobre hechos concretos, como informar hasta qué día la persona deberá ir a trabajar o cómo será el proceso de liquidación. Pero, si no se tienen respuestas concretas, esperar otro momento para informar los aspectos técnicos en otro momento, a través de un correo, o derivar las consultas a la persona encargada de RRHH. Lo peor que se puede hacer en estas circunstancias es responder temas de pagos sin tener los datos a la mano.