La productividad es la clave del éxito para concretar todos los objetivos que uno se propone.
Entre las principales características de las personas productivas, está en pensar al instante, no prolongar una idea por horas. La mayoría divide sus horarios en horas pero ¿sabes cuántos minutos tiene un día? La respuesta es 1440 minutos y cada uno de ellos cuenta.
Enfocarse en una sola cosa. Es clave reconocer la tarea más importante y enfocarse en ella por las mañanas.
No enlistar las tareas por realizar. Según estudios, el 41% de las cosas que incluimos en este tipo de papeles nunca se concretan y esto sólo genera estrés e insomnio.
No postergar ni precipitarse en decisiones. Las personas productivas saben adelantarse a sus auto-sabotajes futuros y con realismo le dan la vuelta e inmediatamente buscan soluciones.
No todo es el trabajo. Dedicarle horas a una actividad física o de recreación para mantener el balance de las horas.
Contar con pequeñas libretas. Llevar una libreta de apuntes es vital para asimilar las ideas que pueden surgir en cualquier momento. Uno nunca sabe cuándo se topará con una idea de un millón de dólares.
Establecer horarios para los correos. Tanto para los del ordenador o las notificaciones del celular, mantenerse distante de estas distracciones que afectan a la labor que se realiza.
Balance de las reuniones. El personal productivo identifica las reuniones a las que asistirá y planifica el tiempo que les dedicará.
Saber decir ‘no’. La diferencia entre las personas exitosas y las personas muy exitosas es que las segundas dicen que no a casi todo”, reza una frase de Warren Buffett.
Seguir la fórmula 80/20. Conocido como el Principio de Pareto, en la mayoría de los casos el 80% de los resultados forman parte del 20% de las actividades. A partir de esto, las personas saben cuáles son las actividades que conducen a los mejores resultados y hacen a un lado al resto.