Si eres de las personas que por diferentes motivos llega tarde al trabajo, ten cuidado porque puedes ser despedido. Justificarse porque hubo mucho tráfico en reiteradas oportunidades no siempre te salvará, pues tu empleador podría no considerar esto como una justificación.
Acumular tardanzas, e incluso faltas, en un determinado periodo sin la debida justificación podría ser causal de despido por ser considerada una falta grave, señala Miguel Rubio, gerente senior del Área Laboral de EY Perú.
Según la Ley de Productividad y Competitividad Laboral, articulo 25, «la falta grave es la infracción por el trabajador de los deberes esenciales que emanan del contrato».
En ese sentido se precisa que, de darse el abandono de trabajo, las ausencias injustificadas, hayan sido o sancionadas disciplinariamente en cada caso, si ha sido acusada por el empleador y se haya aplicado sanciones previas de amonestaciones escritas y suspensiones se procederá al despido.
«Si hay abandono de trabajo por más de tres días consecutivos de inasistencia injustificadas, se procede al despido automático. La falta grave por acumulación de inasistencias se configura cuando el trabajador falta injustificadamente más de cinco veces en un periodo de 30 días o más de 15 veces en un periodo de 180 días», precisa Rubio.
En el caso de tardanzas, se considera como falta grave cuando el trabajador llega tarde más de cinco veces en un periodo de 30 días o más de 15 veces en un periodo de 180 días.
«El plazo que tienen los trabajadores para justificar sus inasistencias es de tres días hábiles luego de producida la falta», detalla el especialista.