Ya cumplidas las cuatro o cinco décadas, el escenario laboral para un desocupado se vuelve mucho más oscuro que cuando se es más joven. Esto se debe a un trato diferencial por razón de la edad, una clase de discriminación de la sociedad actual que privilegia el valor de la juventud por sobre la experiencia.
Así lo demuestran diversos estudios sociales, donde queda evidenciado que si bien ningún empleador se atreve a incluir esta frase en las ofertas de empleo, nadie solicita a adultos que ya no son precisamente jóvenes.
Tips Prácticos
Suyin Palma, psicóloga laboral, aconseja reinventar el currículum. Su sugerencia pasa por registrar aquellas capacitaciones y cursos en las empresas en las cuales se han desempeñado a lo largo del tiempo, así como destacar los logros en cada cargo ejercido.
Con 20 años de trabajo o más se tiene mucha experiencia y bastante es lo que puede plasmarse en el papel; sin embargo, es importante destacar y saber resumir lo más importante para cada cargo al que se está postulando.
Palma explica que "al comenzar esta nueva búsqueda de trabajo, tiene que apuntar a rentas más realistas, porque puede ser que la renta con la cual egresas de la última empresa no sea una renta de mercado (…) porque ya hay un reconocimiento en términos de experiencia individual".
Es un mito que una persona que lleva varios años trabajando vea más negro el panorama de búsqueda laboral, ya que en rigor el mercado del empleo se mueve por las competencias. Jóvenes como adultos "tienen la mismas oportunidades de buscar, la diferencia está en cómo nos planteamos", concluye la psicóloga.
En cuanto a los avisos, por políticas de la empresa, no se permite colocar la edad máxima de las personas que postulan, ese es un filtro que realiza cada empresa.
Lo primero que hay que considerar es que buscar trabajo ya es un trabajo en sí mismo. Para eso es importante establecer un plan de acción con un esquema muy claro de búsqueda activa. Algunos puntos a considerar son:
- Mantener una actitud de ocupación, es decir, trabajar activamente en la búsqueda de empleo.
- Actualizar el CV recapacitando sobre experiencias adquiridas y potenciando el perfil profesional.
- Analizar la red de contacto que se tenga.
- Ser muy disciplinado y metodológico en la búsqueda.
- Adaptarse al mercado laboral, un buen ejemplo es capacitarse en ámbitos tecnológicos, de manera de estar vigente.
- Si es necesario, disminuir las pretensiones salariales. Hay que entender y ser conscientes de que es muy difícil encontrar un trabajo con un salario que iguale al del último empleo.
- Analizar la posibilidad de realizar un emprendimiento o proyectos económicos personales.
Ernesto Velarde, country manager de Trabajando.com Perú, señala que, “a pesar de la prohibición legal de cualquier tipo de discriminación laboral, es muy común que esto pase y no se denuncie”.
“Para nadie es un secreto que las oportunidades de empleo son escazas para las personas mayores de 40 años; sin embargo, la edad no debería ser vista como un impedimento sino como un atributo para los postulantes, quienes por sus habilidades profesionales y logros alcanzados deberían ser tomados en cuenta por los empleadores”, agrega Velarde.