Para muchos trabajadores, los contratos de trabajo suelen durar cuatro o seis meses, por eso, es importante saber el tiempo que se debe estar bajo ese régimen laboral y cuándo el contrato se convierte en indeterminado.
Si se lleva varios años trabajando bajo esta modalidad, es necesario prestar atención a las recomendaciones del Ministerio de Trabajo que detalla cuando un trabajador pasa a ser estable en el Perú y cuáles son los derechos como empleado.
Si el colaborador piensa que estar en planilla y tener la seguridad de renovar era suficiente, hoy se podrá conocer qué otros beneficios se obtiene cuando laboras por más de cinco años en una misma empresa.
Para ser un trabajador estable
El plazo máximo durante el cual un trabajador puede ser contratado a plazo fijo o de forma temporal, incluso sumando varias modalidades, es de cinco años.
Cabe precisar que la ley establece, en algunos casos, plazos máximos aplicables a cada modalidad, inferiores a los cinco años, es decir, pasado ese tiempo, la empresa está obligada a contratar al colaborador de firma indeterminada.
En ese sentido, una vez que se pasa a ser personal estable, el sistema legal peruano contempla rígidos mecanismos de protección del trabajador frente al despido que no se encuentra justificado en una causa prevista en la ley.
Sin embargo, a decir de los expertos, carece de toda lógica que esta protección se adquiriera al momento de la contratación, pues el empleador se podría ver limitado a la hora de prescindir de un trabajador cuyo desempeño esté por debajo de lo requerido.
Tomando en cuenta estas situaciones, la misma legislación establece un periodo inicial en el que el contrato se puede anular sin mayor expresión de causa. Si el contrato no se ha celebrado por escrito o no contiene precisión al respecto, el periodo de prueba es de tres meses.
En estos casos, el periodo de prueba previo a que un trabajador se considere de confianza o calificado puede extenderse hasta los seis meses, y para los trabajadores de dirección hasta por un año.
Locación de servicios
La locación de servicios es un contrato que lo firma quien va a prestar servicios a otro, pero bajo ciertos lineamientos, para ser considerado no dependiente de la empresa, modalidad comúnmente conocida como “independiente”.
Tratándose de servicios prestados a una empresa, la locación de servicios opera para las personas que no van a integrarse funcional ni productivamente a las organizaciones en forma física. Es decir, no tienen que cumplir un horario ni tienen un escritorio o lugar asignado.
No obstante, en el caso de que una persona sea contratada por locación de servicios, cuando realmente es un trabajador que cumple un horario, que tiene un espacio y recibe órdenes directas de un jefe superior, la empresa puede ser pasible de recibir una sanción, ya que en esos casos está obligada a reconocer todos los beneficios que le corresponden al colaborador conforme a ley.
El Ministerio de Trabajo tiene, entre sus líneas de servicios principales, la inspección laboral, y la defensa gratuita de trabajadores, a través de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (SUNAFIL).
Fuente: Aptitus