Este martes 15 de diciembre, el pleno del Congreso, con 94 votos a favor, aprobó el proyecto de la nueva Ley Procesal Laboral. Con esta nueva ley, lo que se busca es agilizar los procesos laborales en el país que hasta la fecha tardaban en promedio 7 años, y en adelante solo demorarían 6 meses en ser resueltos.
La agilización y reducción de los plazos de estos procesos se daría debido a que la nueva ley planea ampliar las bases de juzgamiento, incorporando a los juzgados de paz. Además, los juicios se realizarán de manera oral y las audiencias consistirían básicamente en un debate de posturas presididas por el juez, el cual podrá interrogar a ambas partes, a sus abogados y terceros relacionados, tal como lo mencionó la Ministra de Trabajo Manuela García.
Por otro lado, el presidente de la Comisión de Trabajo del Congreso, el legislador Juan Carlos Eguren de la bancada de Unidad Nacional, comentó que frente a este tema, todas las bancadas estaban de acuerdo con dar luz verde a la nueva ley, lo que se ve reflejado en la unanimidad de la primera aprobación y que fue exonerada, del mismo modo, de la segunda votación, con 89 votos. Con estos resultados solo quedaría su promulgación por el Ejecutivo, lo cual no implicaría mayores complicaciones pues la iniciativa legislativa de esta nueva ley nació del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo en conjunto con destacados juristas del país.
Esta nueva ley procesal laboral contará también con modificaciones y novedades adicionales. En primer lugar, los sindicatos estarán en la capacidad para comparecer en defensa de sus afiliados sin necesidad de poder especial de representación, requisito indispensable en la actual Ley Procesal de Trabajo. Asimismo, las madres gestantes, los menores de edad y los impedidos tendrán opción de la defensa de oficio a cargo del Ministerio de Justicia.