La conciliación trabajo-familia se encuentra más que nunca presente en las inquietudes de los empleados, quienes buscan empresas flexibles para sacar adelante tanto su carrera profesional como el bienestar de su familia.
Por su parte, en un entorno donde es ampliamente aceptada la relación proporcional entre felicidad y rendimiento laboral, las compañías reconocen los beneficios de la conciliación, adecuando sus políticas a las necesidades de cada persona.
Marisa Aguirre, profesora del PAD de la Universidad de Piura, asegura que la tranquilidad en el entorno familiar ayuda a reducir los niveles de estrés producidos por el trabajo, lo cual se traduce en una serie de beneficios directos para las compañías, como una mejora de la productividad y de la eficacia, reducción de costes de sustitución, entre otros.
La receta
Si bien una conciliación eficiente no puede materializarse sin el apoyo de la compañía que puede ofrecer flexibilidad en los horarios, jornadas parciales, oportunidades de teletrabajo, etc. y del Estado encargado de legislar sobre permisos de maternidad, entre otros, también está en las manos del propio trabajador sacarle el máximo provecho a su tiempo.
Para Aguirre, la planificación es la base de la conciliación entre el trabajo y la familia. Saber cuándo salir de vacaciones, en qué momento del día llamar a casa u organizar previamente las actividades a realizar con la familia es lo más importante para mantener el equilibrio.
Publicado en Diario Gestión.