El miedo de perder una oportunidad laboral hace que muchos contengan sus pretensiones económicas al negociar su futuro salario, sobre todo en aquellos que recién inician su carrera profesional.
Muchas veces se recurre a la estrategia equivocada de aceptar la primera oferta económica para luego pedir un aumento.
Según recoge el portal «Business Insider» son tres las grandes «metidas de pata» que se deben evitar al negociar el sueldo.
Aceptar la primera oferta
Los empleadores están listos para entablar una pequeña discusión sobre el futuro salario y sus márgenes. Sin embargo, son pocos los que están preparados para abordar esta charla y muchas veces son las mujeres las que aceptan la primera oferta, según Lee E. Miller, coautor del libro «La guía femenina para una negociación exitosa».
Creer lo que dicen
La primera oferta de salario rara vez es la mejor propuesta. Por ello, a pesar de que se mencionen frases como «la oferta económica por esta posición no es negociable» o «esto es lo que tenemos» no se debe perder la intención de pedir algo más o negociar.
Pedir un aumento luego
Una táctica muy difundida entre los futuros trabajadores es aceptar la primera propuesta para luego demostrar su valor para el negocio y pedir un aumento.
Sin embargo, hay un error en ese enfoque. «El aumento será sobre una base muy baja», anota Miller. En cambio, con un mejor salario negociado, el aumento que se puede conseguir será mucho más alto, explica.
Si bien los trabajadores no están siempre en la mejor posición para negociar, siempre hay que buscar el mejor acuerdo posible como retribución al desempeño.