En la carrera de un profesional existen momentos en los que se debe decidir aceptar o no un puesto de trabajo. Por lo tanto, antes de asumir un trabajo el profesional debe evaluar si la propuesta se ajusta al plan de carrera definido porque, si no es así, lo mejor será rechazar dicha oportunidad.
También, es importante investigar si la empresa cuenta con la reputación de tener buenas prácticas laborales como respeto a los trabajadores, reconocimiento, capacitación, compensación, beneficios, inclusión, flexibilidad laboral, igualdad de derechos y oportunidades, ética e integridad, entre otras acciones, que convierten a las empresas en organizaciones atractivas para trabajar.
¿Cómo rechazar la oferta laboral de manera amable?
Si el postulante ha sido convocado y la propuesta no le conviene, tendrá que rechazar la oferta. Esta respuesta se podría hacer por escrito, mediante una carta o un email en el que se agradece la oportunidad y se explica la razón por la cual no se aceptó el puesto.
Es recomendable responder con prontitud al reclutador. Si las razones son de orden económico, es necesario brindar una explicación que deje abiertas las puertas a fin de poder ser considerado para otra posición acorde a las necesidades. Es preferible que el candidato rechace la proposición antes de aceptarla, y para ello se debe mencionar los motivos de manera honesta, agradeciendo el interés de los seleccionadores.
Es importante tomar en cuenta estos consejos antes de decir que sí a una oferta de empleo. Por ejemplo, no siempre el dinero es lo más importante. Es decir, una buena oferta financiera no significa un trabajo en el que se podrá crecer o hacer carrera.
Asimismo, llegar a una nueva organización implica conocer a los nuevos compañeros y entrar a un proceso de adaptación de la cultura, que podría no acomodarse a nuestros valores o forma de ser. No existe forma de saber si el nuevo puesto será del agrado del profesional, pero es importante saber si el trabajo aportará nuevas habilidades en nuestro desarrollo profesional.
Finalmente, una organización con altos índices de rotación no es buena elección a la hora de aceptar una propuesta de empleo. Por eso debemos mirar con interés aquellas empresas que se reten constantemente, porque estimularán nuestra creatividad y sentido de la innovación.
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