El ingreso promedio mensual de los trabajadores en Lima Metropolitana en el trimestre móvil mayo-junio-julio 2011 creció en 12.6%, comparado con similar periodo del 2010.
Según los datos del reporte de Situación del Mercado Laboral en Lima Metropolitana de INEI, este es el segundo trimestre en que el ingreso promedio de los trabajadores crece a tasa de dos dígitos, pero ese crecimiento se acelera, pues el periodo anterior fue de 10.8%.
Además, es la tasa más alta de crecimiento registrada después de 20 periodos de análisis, cuando en el trimestre móvil ago.-set.-oct. 2009 el ingreso promedio creció a una tasa del 11.2%.
A nivel de tamaño de empresas, en el trimestre móvil mayo-junio-julio 2011 se observa que la mayor tasa de crecimiento en el ingreso promedio mensual de los trabajadores la registran las medianas empresas, que son aquellas que cuentan con entre 11 a 50 trabajadores. La variación fue de 16.7%, llegando la remuneración promedio a S/. 1,318.
Y si se observa el comportamiento del salario promedio de los trabajadores por sector económico, los de la construcción son los que mayor renumeración registran, además de crecer a las tasas más altas.
De acuerdo al informe del INEI, el ingreso promedio mensual del trabajador en el sector construcción se ubico en S/. 1,398 durante el trimestre móvil mayo-junio-julio 2011, creciendo en 14.7% con relación a similar periodo del año pasado.
Empleo
Mientras el ingreso de los trabajadores crece a tasa de dígitos, se observa que la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada también aumenta, pero a un ritmo menor. En el trimestre móvil mayo-junio-julio 2011 creció en 2.3%.
De cada 100 personas que integran la PEA de Lima Metropolitana, 93 están ocupadas: 53 adecuadamente empleadas (aquellas que laboran 35 o más horas a la semana y reciben ingresos por encima de la canasta mínimas de consumo, y por quienes trabajan menos de 35 horas semanales y no desean trabajar más horas).
Las otras 40 están subempleados (12 subempleadas por horas, por que trabajan menos de 35 horas a la semana involuntariamente y 28 subempleadas por ingresos al trabajar 35 o más horas a la semana con ingresos inferiores al valor de la canasta mínima del consumo familiar por perceptor de ingresos).
Asimismo, siete de cada 100 personas que integran la PEA están desocupadas, es decir, no trabajaron por lo menos una hora, pero buscaron algún empleo.