En un mundo laboral altamente competitivo, las licenciaturas, másteres o doctorados no garantizan un buen empleo o un mejor sueldo. Expertos en empleabilidad sostienen que la formación académica es sólo uno de los aspectos que se valoran al momento de la contratación.
Como profesionales, siempre hemos pensado que poseer títulos académicos de primer nivel son esenciales para obtener un ambicioso salario. Por ese motivo, en muchas ocasiones, observamos que los profesionales con posgrado suelen recibir un mejor sueldo que uno con licenciatura. No obstante, este hecho no siempre influye en la variación de los salarios.
Si bien es cierto, para algunos cargos es indispensable contar con un posgrado, en muchos casos, los títulos académicos no pesan lo suficiente para la permanencia de un trabajador en una organización.
“El valor añadido del candidato a un puesto viene determinado por su capacidad de adaptación, más que por su formación, y eso impacta en su salario” afirma Ernesto Poveda, presidente de Icsa Group.
De hecho, varios directores de recursos humanos y consultores en selección mencionan que los títulos académicos, como la formación posgrado, son solamente un “plus”, mas no siempre significan un aumento retributivo en el salario o determina con seguridad un empleo. A excepción de algunos cargos que requieran obligatoriamente un máster para ejecutarse.
«La capacidad de negociación salarial vinculada directamente a un máster es escasa o prácticamente inexistente. Valoramos en mayor grado la versatilidad, el potencial, la capacidad de adaptación y la actitud del candidato», explica Fernado Ríos, director de RRHH de Mondelez en Iberia.
Es así que, los títulos académicos no tienen mayor influencia en el salario. De esta forma, se valora más las habilidades que el profesional presenta habilidades para adaptarse y aportar en el trabajo. Asimismo, el conocimiento y compromiso son elementos indispensables para lograr el éxito en el cargo.