Teniendo en cuenta que su capital humano es su mayor activo, IBM busca generar impactos positivos en la sociedad al profesionalizar la labor de sus voluntarios.
Jaime García, gerente general de IBM en el Perú, dice que para ello la empresa creó una plataforma tecnológica denominada On Demand Community, en la cual los voluntarios de IBM pueden registrar las horas de trabajo social que han cumplido (se les exige 40 horas de voluntariado al año) en los distintos proyectos de responsabilidad social que tiene la transnacional con socios locales alrededor del mundo.
Así también IBM ha desarrollado el Cuerpo de Servicios Corporativos. García explica que este es un programa en el que los empleados más comprometidos de la organización son elegidos para viajar a países emergentes a fin de ejecutar proyectos sociales por tres semanas.
"Elegimos a colaboradores que tienen mucha vocación de servicio", agrega García. Dependiendo de sus intereses, ellos pueden enrolarse en proyectos en los que se dona alimentos a los más pobres o se dictan cursos de reforzamiento educativo en las escuelas. De hecho, hace pocos años IBM diseñó Reading Companion, un programa que se vale de las tecnologías para que niños y adultos aprendan inglés.
En el Perú, IBM apoya a socios como Fundades, Enseña Perú y Empresarios por la Educación (EXE). Con esta última organización ha implementado un programa de inclusión digital en Arequipa para que docentes aprendan a utilizar las tecnologías de información en las aulas y eleven la educación de sus alumnos. Ya son más de 2.000 profesores beneficiados por este programa y hoy se espera extenderlo a Trujillo y Cusco.
En el 2010, tres empleados de IBM en el Perú fueron distinguidos con el On Demand Excellence Award, que reconoce la labor social de los colaboradores de IBM alrededor del mundo.
Fuente: Diario El Comercio
