La cultura de “para más tarde” existe y aunque suene gracioso, afecta su productividad a niveles de quitarle el 50% de su jornada laboral en “distracciones”.
“Cuando hablamos de productividad personal, la idea es lograr más con menos esfuerzo. Entonces, eso tiene mucho que ver con la capacidad de priorizar aquellas actividades que nos acercarán a nuestros objetivos o metas. Muchas veces nos llenamos de actividades; sin embargo, estas no nos acercan a nuestras metas, que no agregan valor.”
Productividad
Dentro de la cultura del “para más tarde” o procrastinar, Reyna explicó, que es una debilidad personal. “Las causas son no tener claro lo que se tiene que hacer o cómo abordar el tema. Por ello, se dilata, se cambia por las actividades más “fáciles” o por algo que te gusta.”
Comentó también que todos tenemos esto, pero en diferente magnitud y está relacionado directamente con la productividad y estrés que cada colaborador carga. “El estrés es una de las cosas que más merma tu productividad. Esa concentración que se necesita para tus actividades se va en el estrés. “
“La cultura del “para más tarde” es una protección natural del ser humano. Algo que es incierto, riesgoso, tendemos a evitarlo.”
En promedio, dijo Reyna, recibimos 7 a 8 interrupciones en cada hora de trabajo. Estas interrupciones duran aproximadamente 5 minutos.
“Con eso, podemos decir que casi el 50% de tu jornada laboral puede pasarse en distracciones”. Finalmente, comentó que de todas estas distracciones, el 80% no ameritan el tiempo perdido.
Fuente: Gestión