Uno de los factores que pueden provocar estrés e insatisfacción laboral es tener que lidiar con un jefe "incompetente". Es probable que el trabajador esté realmente comprometido con la empresa e incluso disfrute de las labores que realiza, sin embargo, toparse con un superior así, puede provocar desmotivación y frustración; emociones que lo pueden llevar a tomar la decisión de renunciar.
El portal de empleo Trabajando.com explica que un líder que no está preparado para el rol que asume dentro de la compañía presenta las siguientes características: no es apto o no está capacitado para el puesto, delega en exceso las actividades a sus subordinados, tarda en tomar decisiones importantes que beneficien al equipo y/o empresa, se involucra poco con la gente que le rodea y, por lo tanto, carece de información de sus empleados, somete a presión, etc.
Trabajar en esta realidad es una situación que el subordinado no puede controlar directamente, ya que quien decide cómo se conformará un equipo de trabajo es la dirección, la gerencia o el área de Recursos Humanos. Sin embargo, existen algunas medidas para sobrellevar la situación y aminorar los malestares que desencadena el deseo de salir de la empresa:
Un subordinado siempre debe respeto: es importante reconocer que el jefe tiene poder y, ante los ojos de los demás, él tiene “razón”. Por este motivo, es importante evitar evidenciarlo o acusarlo frente a sus superiores, ya que lejos de ayudar puede provocar más problemas. Mantener una línea de respeto puede ser de gran ayuda.
No declarar la guerra: es vital que se fomente el trabajo en equipo, convertirse en aliado del jefe y tratar de mostrarse receptivo a sus observaciones. Con el tiempo, comenzará a darle más valor a la opinión del colaborador y éste se sentirá menos frustrado.
Negociación: buscar la manera de hacer sinergia para que de manera diplomática se pueda orientar al jefe sobre cómo ejecutar el trabajo, sin que él se ofenda o se sienta amenazado.
Alinear criterios: trabajar de manera autónoma y buscar la unión de las ideas del trabajador con las de su jefe, de esta manera se agregará más valor al trabajo en conjunto que se realice.
Buscar aliados: la mejor manera de mostrar el trabajo y el esfuerzo de cada uno es ser honestos y proactivos, al tiempo que se construye una red de aliados dentro de la organización.
Solicitar un cambio de área: acudir a Recursos Humanos y solicitar un cambio de área; sin hablar mal del jefe, lo mejor es ser propositivo y ofrecer soluciones.