Como ya sabemos Lima ha sido desde siempre una de las principales ciudades del mundo con mayor contaminación acústica conociendo su fuente principal, el alto tránsito vehicular. Sumado a ello, construcciones y actividades industriales que, si bien es cierto, se han visto reducidas por la actual pandemia, ya han sido retomadas en su mayor parte pudiendo escuchar desde nuestras viviendas ese ruido incómodo que nos acompaña en esta “nueva normalidad” con la que nos tocará vivir por muchos años
Por esa razón, Sheyla Hilares, Gerente Comercial de la compañía VentLife Perú, precisa 3 consecuencias principales que se derivan de estar expuestos al exceso de contaminación acústica en los espacios de trabajo:
- Falta de concentración: Diariamente muchas empresas exigen a sus colaboradores la realización de tareas en un alto nivel de concentración. En un ambiente plagado de ruido y distractores, difícilmente se podrán realizar estos procesos, pues la mente de la persona se encuentra más concentrado en evitar y tratar de ignorar los sonidos que en el trabajo mismo. Sin embargo, cuando una persona presta totalmente atención y se encuentra 100 % concentrado en una tarea la desarrolla más fácilmente, evitando errores.
- Estrés y desesperación en los calls: Cuando se presentan las reuniones por meet, zoom u otra plataforma virtual, muchos colaboradores están pendientes de apagar el micrófono ante cualquier eventualidad que suceda, principalmente ligado algún ruido molesto de la calle o en el mismo hogar. Asimismo, cuando llegue el momento de exponer o intervenir en dicha reunión, suele presentarse estos ruidos que no son propios del lugar y que parecen ser prácticamente inevitables.
- Ambiente hostil en tu entorno: Con el estrés que el trabajador pueda sentir por estos inconvenientes que se presentan en el teletrabajo, podría generar un ambiente hostil afectando a la labor diaria empresarial, sino que, además, a la personal y a la del descanso.
Este nuevo estilo de oficina nos hace replantearnos en muchas ocasiones nuestra productividad actual y la cantidad de factores que pueden hacernos perder la concentración en nuestras casas. La cuestión es cómo erradicar dichos problemas acústicos. En este caso, existe la opción de adquirir soluciones como el reemplazo de las ventanas, mamparas y puertas que ayuden a aislar el ruido perjudicial además de humedad, calor, polvo e inclusive la reducción de energía eléctrica en los hogares.
En el mercado peruano se puede encontrar a empresas como Ventlife Perú que se caracteriza por contar con un equipo técnico altamente calificado y con más de 30 años de experiencia adquirida en Europa y parte de América Latina, quienes brindan servicios de instalación de mamparas y puertas termoacústicas de UPVC que permitirán evitar la contaminación acústica y los problemas que ello origina.
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