Por Manuel Celi – Managing Founder de A-COACH.PE
Hace poco, uno de mis clientes emprendió una reorganización integral de para convertir su empresa en una de clase mundial y ponerse en la cima de su industria. Como es usual en estas re-ingenierías, despidió a un grupo de los altos gerentes, a quienes yo conozco bien por haber interactuado con ellos durante años.
Una vez avisados, todos siguieron un proceso de out-placement, pero cada uno asumió su salida de una manera diferente.
Para una de ellas, su despido fue el fin del mundo que hizo que ella declarara el fin a su carrera. ¿Qué más puedo hacer, quién me va a contratar con 45 años?, me dijo una vez.
En cambio, para otro, fue como una señal del universo. Él sentía que necesitaba un cambio y su salida se lo estaba permitiendo. ¡Qué suerte, voy a aprovechar esta oportunidad!, decía.
Cada uno de los otros tomó el despido de una forma diferente. Mismo evento, diferente lectura personal. Un cambio igual para todos, reacciones diferentes.
El filósofo Heráclito decía: Lo único constante es el cambio». Siempre estamos frente a cambios. ¿No es esta una suficientemente buena razón para aprender a gestionar el cambio?
Pero ¿y si eres tú y no el entorno, el que quiere hacer cambios?
¿Por qué querría hacerlo, pudieras preguntarme? Muchos como mi amiga del ejemplo de arriba, percibió su despido como algo catastrófico, pero porque esa era su maneja habitual de ver las cosas, con pesimismo.
Expresiones como «no va a funcionar, no se va a vender, no lo van a entender» siempre salió de su corazón a través de sus labios, o quizá fue al revés. El final feliz de su historia es que ella tuvo que romper con su rutina de producción de pensamientos negativos y, más bien, ella aprendió a través de la meditación a generar nuevos hábitos como la meditación que la llevara a generar gratitud reconociendo sus creencias y acciones positivas.
¿Te has preguntado qué tendrías que cambiar tú? Si lo empiezas a mirar desde diferente perspectiva, encontrarás que hay cosas que te impiden mejorar tu desempeño. Las verás primero a través de tus actos y conducta pero provienen de creencias y juicios que crean una realidad que no te está funcionando.
A lo mejor el tremendo ego que has puesto de manifiesto desde que te ascendieron a Gerente General, te ha convertido en un insoportable líder de tipo militar que usa todo su poder para esconde una baja autoestima. O que tu falta de empatía genera diálogos unipersonales, digamos monólogos, con tus colegas o los que te reportan.
Y como en general, vivimos en automático, nos va a costar bastante reconocer la necesidad y pasar por proceso diseñado de cambio.
¿Cómo se empieza? Te describo 3 cosas que tienes que hacer si quieres cambiar rutinas:
- Haz tu diagnóstico. Puedes hacerlo tú solo con meditación, herramientas y auto-evaluaciones disponibles o con la ayuda de un Coach o un mentor en tu empresa. Como lo hagas no importa pero sí lo es que descubras aquello que es un lastre para tu carrera y vida en general. Si te sirve de consuelo, siempre hay una lista larga de hábitos que cambiar.
- Debes calcular el costo de no cambiar. ¿Cómo se hace? Primero que nada, vístete de humildad. Mira cómo son tus relaciones. Revisa los resultados de tus acciones. Pregunta a tus colegas qué creen ellos que tú te estás perdiendo. Cuando sepas qué no está llegando a tu vida por seguir viviendo en modo automático encontrarás motivación que te dará mucha energía para lo que tienes que hacer. Recuerda que los cambios tienen mucho que ver con la fuerza de voluntad.
- Haz un plan de acciones. Una vez lo hayas hecho nombra a alguien como el auditor del cumplimiento de tus acciones para generar nuevos hábitos. Pídele a esa persona que te tome cuentas diariamente. O si lo quieres hacer solo, haz una lista de acciones que tú mismo revises al final del día y pongas el porcentaje de cumplimiento. ¿De 10 acciones hiciste 7?, entonces hoy trabajaste al 70% para tu futuro. Al día siguiente lo mismo.
Si eres más digital, yo te puedo recomendar una plataforma que se encarga de enviarte un mensaje diariamente al final del día, planteándote tus propias preguntas.
Recuerda que cada propuesta de cambio personal transita por etapas como negación, ansiedad, aceptación y recién al final compromiso. Esas etapas sabotean tu voluntad por lo que mejor apaláncate de alguna manera, con tu pareja o un amigo o algún sistema.
Por ejemplo, digamos que prefieres usar una aplicación y no una persona, imaginemos que tú estás trabajando en lograr una mejor calidad de vida y has visto que desde que eres Gerente General trabajas mucho más tiempo que antes por la inseguridad en tu competencia profesional y liderazgo.
Eso está destruyendo la buena relación con tu familia y esa falta de soporte afectivo, tu familia, agrega más inseguridad a tu vida. En las acciones para generar cambios has decidido trabajar solo 8 horas al día y prohibido llevar trabajo a la casa. Más bien dejar temprano la oficina, tener vida familiar y tener tiempo para actualizarte profesionalmente a través de la lectura u otros medios. Buena decisión, ¿no?. Sí, pero ya sabes, la rutina es muy fuerte.
La aplicación que te sugiero se llama topmind.com y te hará tus preguntas al final del día. Te enviará un email + SMS y te preguntará algo así: ¿puse hoy todo mi esfuerzo por irme a casa a las 5:30pm no llevando trabajo?. Si cada día, durante unas 6-8 semanas te preguntas eso y lo tienes que responder sí o no, seguramente a la octava semana ya estarás yendo a tu casa a las 5:30pm. Habrás formado un nuevo hábito. Habrás cambiado un mal hábito que escondía una creencia limitante sobre la que no estabas haciendo nada.
Y nuevamente, ¿por qué hacer todo este esfuerzo?. Porque queremos mejorar nuestro desempeño en general. Queremos mejores resultados dedicando menos de nuestra vida a la tarea.
Porque con mejores hábitos tenemos más libertad de acción y bienestar.
¿No es eso por lo que trabajamos?
Sobre el autor
Por Manuel Celi Vidal – Coach Ontológico Empresarial para directivos y ejecutivos. Empresario con más de 40 años de experiencia en negocios de servicios logísticos y comerciales innovadores como proveedor estratégico de grandes empresas locales y de países andinos. En 2014, Manuel fundó A-COACH.PE, organización que brinda servicio a personas y organizaciones exitosas en sus procesos de cambio.