El objetivo de todo profesional debe estar enfocado en función a su red de contactos. En ese sentido, es importante contar con un plan específico al momento de acudir a las personas que podrían servirnos de nexo para alcanzar la recolocación laboral.
Uno de los mecanismos que permiten mejorar las opciones de encontrar empleo es el buen uso de las redes de contacto, que son por definición el grupo de personas con las cuales tenemos o hemos tenido algún tipo de vínculo directo o indirecto en diferentes aspectos de nuestra vida cotidiana.
Melissa Garrido, gerente de Selección y Capacitación de Atento Perú, explica que una red de contactos se debe clasificar en función a la cercanía con los tomadores de decisiones en el ámbito laboral.
“Podemos tener muchos contactos, pero es importante que, mediante el acercamiento, identifiquemos si son personas que pueden presentarnos o facilitarnos el acceso a una convocatoria, con cierto grado de influencia, o son personas referentes que solo nos abrirán las puertas a un contacto en la organización”, señala Garrido.
En ambos casos, estos contactos, bien gestionados, podrán acercar al postulante a la posición deseada en una empresa.
Por su parte, Katia Zapata, directora de Selección, Servicio y Calidad de Adecco, asegura que, generalmente, se suele hablar de dos niveles de contactos.
El primer nivel está conformado por todas aquellas personas que conocemos de forma directa y con las que mantenemos un vínculo cercano. Es decir, por nuestro círculo social directo. Los contactos de segundo nivel son aquellos a los cuales accedemos por medio de nuestros contactos de primer nivel.
El lazo de confianza y accesibilidad es más limitado, pero su valor es enorme en términos del alcance de nuestra red.
Para optimizar una red de contactos, Zapata sostiene que lo mejor es desarrollar diferentes tipos de contactos a lo largo de la vida profesional, con el fin de poder desarrollar relaciones sólidas y sostenibles en el tiempo.
Así mismo, es importante contar con un plan específico al momento de acudir a la red de contactos con fines de recolocación laboral.
El plan debe tener responder las siguientes interrogantes:
1) ¿En qué sectores se desea explorar oportunidades laborales?
2) ¿A qué posiciones se debe dirigir?
3) ¿Qué empresas dentro del sector son las que más atraen y por qué?
4) ¿Cómo prepararse o qué se debe investigar antes de acudir a un contacto determinado?
Por último, el candidato debe estar siempre listo para ofrecer o ayudar a los miembros de su red de contactos. Es así como la red de contactos permite mejorar las opciones de encontrar empleo.
