La informalidad laboral en el país, sin incluir Lima y Callao, alcanzó el 80% el año pasado, advierte el Centro de Investigación Empresarial (CIE) de Perúcámaras. Lo que implica que 8’632,297 personas en el interior del país no pertenecen al sector formal de la economía (0.4 puntos porcentuales menos en comparación al 2016).
Por regiones, Huancavelica y Cajamarca registraron las tasas más altas de informalidad laboral en el país (91.3% y 90.1%, respectivamente) en el 2017. Les siguen Ayacucho (88.9%), Puno (88.1%), Apurímac (86.7%), San Martín (85.6%), Huánuco (85.4%) y Amazonas (84.9%).
Mientras que Ica registró el menor número de trabajadores informales (62.2%). Seguida de Arequipa y Moquegua (65.4% y 68.8%, respectivamente).
La informalidad laboral en Lima y Callao alcanzó el 58.7% y 56.3%, respectivamente, el año pasado.
El informe de Perúcámaras indica que las actividades de agricultura y pesca presentaron una tasa de informalidad de 97.1% en el interior del país. Estos sectores concentran al 24.7% de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada a nivel nacional.
En las regiones de Cajamarca, Huánuco, Ayacucho, Apurímac y Amazonas estas actividades son 100% informales.
Por su parte, los sectores comercio y servicios registraron tasas de informalidad de 78.5% y 52.8%, respectivamente. Dichas actividades representan el 17.9% y 28% de la PEA ocupada a nivel nacional, respectivamente.
Huancavelica registra el mayor número de trabajadores informales en el sector comercio (91.7% de la población ocupada), seguida de Ayacucho (90.4%) y Puno (87.3%). En tanto Ucayali registra la tasa más alta de informalidad en el sector servicios (61.4%), seguida de Puno (59%), Tumbes (58.6%) y Ayacucho (58.5%).
